Después de las elecciones del 7 de junio de 2015, los ataques fascistas del frente AKP / MHP encabezado por Tayyip Erdoğan continuaron intensificándose. Con estos ataques, el bloque fascista intenta aplastar el frente único de las fuerzas democrático-revolucionarias, extender la desesperanza y sofocar el deseo de libertad del pueblo kurdo. Por otro lado, antifascistas y anticolonialistas, resisten bajo todas las circunstancias y con todos los medios y formas de lucha manteniendo su posición y sus filas. El sujeto principal de esta resistencia son nosotr*s, l*s comunistas marxista-leninistas, así como el movimiento nacional kurdo y las partes revolucionarias de la izquierda laboral. Por esta razón, somos ante todos atacados por la dictadura fascista, que tiene el objetivo de separar nuestros vínculos con las masas populares progresistas. Sin duda, este es un período difícil con muchos pérdidas. Y, sin embargo, aunque los innumerables arrestos también han llevado a una pérdida de calidad entre las filas luchadoras, el estado fascista no ha logrado su objetivo. El fascismo no pudo romper el frente revolucionario-democrático y la resistencia del movimiento revolucionario en Turquía y Kurdistán continúa. El movimiento de masas progresivo se debilitó, pero demuestra su existencia en cada oportunidad y salió a la calle. Ni las prisiones, ni las masacres, ni el estado de emergencia han alcanzado el objetivo del fascista. Como vanguardia revolucionaria, estábamos decididos y pasamos a la autodefensa activa durante este tiempo. En todo este período, el mayor logro fue que se defendieron los frentes de lucha unida y se construyeron otros nuevos, como las unidades militares de HBDH y KBDH. La elección del bloque gobernante fascista en el 24 de junio marca el comienzo de una nueva fase. Estas elecciones no son elecciones normales. Si la dictadura los pierde, todos los gobernantes fascistas serán responsables de su gran culpa contra los pueblos. Es obvio que van a usar engaños electorales y provocaciones para prevenir una pérdida electoral. Qué locura usará la dictadura en una pérdida posible de elección no es previsible. El ejército turco ya ha bombardeado aldeas civiles en Qandil, que es un área libre del movimiento de libertad kurdo. Su estrategia en las elecciones es dejar que el HDP (Partido Popular Democrático) caiga bajo el obstáculo electoral para obtener una mayoría absoluta en el parlamento. Por otro lado, se esperan ataques contra el partido IYI (se separó del MHP) para reducir su potencial electoral. Los fascistas ya no tienen sus viejos poderes. El frente burgués está dividido y la situación económica del país está empeorando cada día. El desempleo aumenta constantemente y la pobreza aumenta a medida como aumenta la inflación. Cada vez más personas se suicidan debido a deudas incompatibles. Existe una fusión increíble dentro de las masas trabajadoras y la dictadura no logra evitar esto por medios económicos. Como resultado, tienen menos oportunidades de ganar las masas populares a través de su ideología político-islámica. En su desesperanza, no han logrado separar al pueblo kurdo de su vanguardia con el terror fascista, ni han intimidado a la población mediante el anuncio de amnesia para los jefes de la mafia y los asesinos fascistas encarcelados. Todo esto muestra la pérdida de poder de la dictadura. Sin embargo, el HDP está ganando terreno al unir grandes partes de la mano de obra izquierda con el HDP. Ahora se trata de aprovechar esta oportunidad como un ataque contra la dictadura colonial fascista. Cada oportunidad de reunirse con las masas tiene que ser usado. Cada voto es una resistencia, cada persona que gana en las filas de l*s socialistas en la lucha contra la dictadura fascista es una ganancia de la resistencia. Pero no limitamos nuestro horizonte con eso. La campaña electoral también es un momento en el que estamos fortaleciendo y reorganizando los frentes. No solo ganaremos a la gente por los votos, el objetivo es hacer de tod*s una parte organizada de la resistencia y permitir que la energía de l*s hombres se abra a través de ella. Por lo tanto, es hora de organizar consejos populares democráticos dentro del frente unificado revolucionario-democrático. Estos consejos democráticos son las estructuras organizativas para aumentar la lucha. La campaña electoral proporciona la base para esto y la organización de consejos democráticos en las calles, barrios, parques y plazas es parte de nuestra preparación revolucionaria. La lucha contra los próximos engaños electorales y las provocaciones tendrá éxito de esta manera. Nuestro objetivo es llevar a las masas a las calles y conquistar las calles. Para eso, fortalecemos la moral de las masas progresivas. Toda nuestra energía está dirigida a esta oportunidad. Es impredecible qué métodos sucios aplicará la dictadura fascista si, debido a la falta de votos, necesita una posible segunda ronda electoral el 7 de julio. Las tácticas para este caso se decidirán bajo las nuevas condiciones del 24 de junio, hasta el momento para vencer al bloque fascista. Para el caos subsiguiente, nuestros objetivos revolucionarios nos guiarán. Para concluir, queremos enfatizar que luego de las elecciones del 7 de junio de 2015, la juventud comunista sufrió el primer ataque del golpe fascista con la masacre de Suruç, pero respondieron con resistencia a esta nueva etapa. Ahora es el momento para que l*s comunistas lleven la resistencia a una nueva etapa. La campaña electoral será un escalón para la lucha.
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