Las fluctuaciones que se presentan en los mercados financieros desde el mes de mayo, todavía continúan. Según el informe del Banco Mundial, la afluencia de capitales a los "países en desarrollo" tuvo grandes dimensiones. Las inversiones de acciones netas subieron de 166,1 miles de millones de dólares en 2002 a 298,9 miles de millones en 2005 y la suma total de 171,5 miles de millones de dólares en 2002 a 490,5 miles de millones de dólares en el año 2005.
La economía turca ha aprovechado mucho de esta afluencia de capitales. A causa de la afluencia de capitales a Turquía, se bajaron los intereses y se realizó un crecimiento en altos porcentajes. Pero las fluctuaciones de coyuntura de los últimos meses y el hecho de que aumentaron los intereses en la economía norteamericana dio una vuelta a la afluencia de capitales a los "países en desarrollo", el capital empezó a acudir en dirección opuesta. Eso resultó en la subida de intereses en países como Turquía y en la huida del capital que había venido.
El hecho de que los capitales ajenos "volvieron a su casa" o su cambio de dirección, que había empezado con el aumento del tipo de interés por el FED (Sistema del Banco Central de los Estados Unidos), impactó de manera bastante negativa las economías de países dependientes del imperialismo como Turquía. Ya se había acabado la abundancia de dólares, la afluencia de capitales baratos y nutridos que existía en terminos generales desde el 2003.
Este movimiento del capital a la escala internacional junto con las condiciones internas resultó en Turquía en fluctuaciones grandes y finalmente subió el tipo de cambio. La cotización de dólares, que antes había bajado a causa de la afluencia de capitales concentrada, empezó a aumentar de nuevo en las últimas semanas. El capital de fuentes externas empezó a cambiar su dinero invertido en la Bolsa de Estambul o en bonos del Tesoro en dólares y a huir al extranjero. Por eso, la Bolsa de Estambul fue evaluada de 30 por ciento. Como resultado de esta huída, el dólar fue reevaluado de 25 por ciento en proporción a la YTL (Nueva Lira Turca).
Son la clase obrera y los trabajadores que sufren de estos desarrollos en los mercados financieros. Los ingresos reales de los obreros y trabajadores bajó de 25 por ciento a causa de la cotización ascendiente; la devaluación de la YTL de 25 por ciento en proporción de la moneda extranjera (dólar), quiere decir por la devalución de 25 por ciento. A través del aumento de 20-25 por ciento, que afecta inevitablemente los precios, el poder adquisitivo de los obreros y trabajadores se reduce por 20-25 por ciento. Con el fin de arreglar la carga del interés - el aumento del interés era 50 por ciento - también se añade el aumento de precio del lado del Estado a los productos y servicios y el aumento de impuestos. Esta carga también afecta a los obreros y trabajadores. Van a venir nuevos aumentos de precio, cortes de sueldos de la educación, de la salud, de la seguridad social y en el campo de la agricultura.
Los primeros resultados de la oleada del aumento de precio, causado por la devaluación son: subida de precio del gas natural de 5 por ciento, de gasolina de 3,7-3,8 por ciento, de gasóleo de 2,2 por ciento, de víveres de 10-15 por ciento, de artículos domésticos electrónicos de 5-10 por ciento, de servicios médicos de 2,5 por ciento, de transporte público de 1,53 por ciento, de comunicación de 0,59 por ciento, y de productos de hierro y acero de 10-15 por ciento.
En los últimos meses se vive una nueva oleada de fusiones en la economía mundial. En el primer trimestre del año 2006 el número de fusiones y tomas subió a 5.801 y la suma total de ellas a 589 miles de millones de dólares. Los monopolios norteamericanos y alemanes se quejan de que no encuentran posibilidades de utilización del efectivo que tienen en sus casas (La suma total de los efectivos en las casas de los monopolios es: Exxon 31,9 miles de millones de dólares, Microsoft 34,8 miles de millones de dólares, Berkshire Hathaway 43 miles de millones de dólares. La suma total de los 30 monopolios de DAX es 210 miles de millones de dólares).
Este capital en búsqueda de la ganancia máxima ejerce una presión enorme en la economía mundial y busca caminos de solución. Esta situación muestra que la economía mundial no está en una posición estable, que es sensible. Por esta razón, todo desarrollo negativo en la economía mundial puede destruir el equilibrio de los países como Turquía y  el resultado final afecta toda  la clase obrera y las masas trabajadoras.
Esta gran acumulación de capital en manos de los monopolios muestra al mismo tiempo las dimensiones de desmoronamiento de la economía mundial imperialista. Por un lado está el capital de miles de millones que no puede conseguir posibilidades de realizar la ganancia máxima y que no hace otra cosa que saquear las economías de los países en los cuales entra y a chupar la sangre de las masas trabajadoras. Al otro lado están miles de millones de personas viviendo en la miseria.