Dos empresas industriales estratégicas en Turquía, TUPRAS y Erdemir son el blanco del ataque privatizador. Los grupos monopolistas imperialistas y colaboradores están compitiendo para usurpar TUPRAS y Erdemir, los cuales han sido puestos en negociaciones de venta. Agrandándose el blanco de saqueo, se han agrandado las contradicciones y el conflicto entre los privatizadores. Las empresas colaboradoras del imperialismo pretenden ser "nacionalistas", y la participación de un capitalista israelita a la negociación ha recordado a los monopolios rivales "el amor de la patria".

Veremos los primeros signos de una lucha y resistencia decidida de los obreros, quienes perdieron sus trabajos y su porvenir a causa de los ataques privatizadores. En el proceso de la venta z negociación, los obreros de TUPRAS pararon el trabajo, los de Erdemir cortaron la carretera entre Ankara y Estambul. El sindicato Petrol-Is convocó a no empezar el trabajo en todos los lugares de trabajo donde están organizados y armó "los tiendas de la guardia de la patria". Y convocó a los obreros a proteger sus trabajos y "a los todos quienes aman su patria a estar de guardia en estas tiendas".

La lucha contra la ofensiva de privatización contiene la posición antiimperialista de los obreros y al mismo tiempo sus iras de clases. Pero la burocracia sindical y los partidos reformistas hacen que esta posición pierda su contenido real, bajo el nombre de "la defensa de la patria". Ellos causan una gran ilusión haciendo una elección entre los falsos y prefieren la venta de las KIT (Instituciones Económicas Publicas) al "capital nativo" en vez del capital imperialista y colaborador. El presidente del Turk-Is, que es el sindicato más grande de Turquía, Salih Kilic exigió que no se vendan Erdemir "a los empresas extranjeras sino a las nativas".

El presidente de TOBB, la organización patronal, H. Hisarciklioglu declaró que habían formado un grupo de iniciativa común para la negociación diciendo "Nuestro objetivo es hacer Erdemir uno de los 5 productores de Europa y uno de 10 del mundo, en vez de hacerle una parte pequeña de las empresas multinacionales", como si ellos mismos representaran "el capital nacional".

Los generales propietarios de OYAK que se nutre de las KIT hasta hoy también han declarado que son solicitantes de estas instituciones en nombre del "capital nativo".

Estas declaraciones han llevado a la orden del día nuevamente la cuestión: "¿Qué tipo de oposición contra la privatización para el éxito de la lucha?":

Privatización significa el estrechamiento del sector del capitalismo del estado a favor de los intereses de la burguesía; y también significa que los obreros, quienes trabajan en este sector fuesen condenados al trabajo flexible, a la desocupación y desorganización. Privatización lleva destrucción no sólo a los obreros sino también al pueblo. Porque privatizan los servicios de salud y educación igual que las KIT. Es decir, no venden la patria sino venden el futuro de los obreros y los trabajadores, usurpan sus derechos ya conseguidos.

Por eso la cuestión que si la empresa privatizada va al nativo o al extranjero no forma la esencia del problema. El capital no se preocupa de la nación sino del interés. Y los patrones tratan de usurpar más intensamente el trabajo de los obreros en todos los lugares.

Los obreros de TUPRAS y Erdemir no tienen otra salida que tomar como ejemplo los obreros resistentes de SEKA y Seydisehir. Pueden rechazar este ataque sólo para avanzar en la línea de lucha de facto legitimada y para traspasar las sugerencias de la burocracia sindical y de los partidos reformistas. Como el representante de la E SP dijo en su discurso durante su visita en los lugares de resistencia, "realizan las políticas del FMI con las demoliciones de casas por un lado y con privatizaciones por otro lado. Los trabajadores no tenemos otra solución que organizar la resistencia popular unificada contra estas ofensivas"

Y este es el camino verdadero para vencer.