¡La resistencia no se puede prohibir!
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A pesar de todos los intentos del imperialismo para ocultar su derrota en Irak, la realidad muestra su rostro cada día más claramente: ¡los ocupadores están con el agua hasta el cuello! Ni con las elecciones ni con los debates sobre la constitución el imperialismo consiguió de aparentar democracia o aún de encausar la resistencia legítima contra la ocupación. En Irak, un pueblo entero está ofreciendo resistencia en contra de la ocupación de su país; una ocupación que significa cada día Abu Ghraib, arbitrariedad, violación, provocación de conflictos nacionales, dependencia y miseria.

Se alzaron los pueblos en todo el mundo en contra de esta guerra y la ocupación sigue; millones concurrieron a las calles y gritaban en todos los idiomas: "¡No a la guerra contra Irak!" Vinculado con las protestas en contra de las ataques neoliberales contra los trabajadores de su propio país, expresaron en voz alta su protesta en contra de la agresión contra el pueblo iraquí. Con el fin de reforzar la solidaridad con el pueblo iraquí y su resistencia y de impedir que se saque este tema del orden del día después del anuncio del "fin de la guerra en Irak", una alianza amplia organizó en el mes de mayo de este año en Berlín una conferencia para apoyar la resistencia legítima. El papel tan importante que juega la solidaridad se podía ver una vez más a través de los numerosos intentos llevados a cabo con el fin de impedir esta conferencia. Pero a pesar de todos los intentos de intimidar y de las provocaciones, se llevó a cabo exitosamente la conferencia.

Entre el 1 y el 2 de octubre 2005, será preparada una conferencia internacional en Chianciano para apoyar la resistencia. Cuanto molesta esta conferencia a los que están en el poder se mostró ya por las ataques durante el tiempo de la preparación, entre ellos: redadas, detenciones de organizadores y confiscación de material. Cuando los organizadores no se dejaban intimidar, fueron impuestas otras medidas; 44 senadores norteamericanos ejercieron presión sobre el gobierno italiano, así se rechazaron las visas de entrada a los participantes de la conferencia de Irak bajo el pretexto de que serían "predicadores del odio" y una "amenaza para la seguridad nacional". Los organizadores de la conferencia respondieron con una huelga de hambre. Así es que la conferencia no pudo tener lugar como había sido planeada para el 1 y 2 de octubre, se planificaron actos internacionales de protesta para esta fecha.

En un país donde supuestamente reina democracia se imposibilita a personas de expresar y discutir su opinión libremente. Con este acto el gobierno de Berlusconi y el régimen de Bush nos han dado otra lección en cuanto a cómo debemos entender su democracia: arbitrariedad, ausencia de derechos y opresión.

Pero en el mundo no sólo existen los Bushs, Blairs y Berlusconis, en el mundo hay millones de oprimidos que anhelan un mundo de paz y libertad. Los imperialistas saben bastante bien que tienen sus días contados, porque nada puede detener el rumbo de la historia. Cuándo los pueblos se unen y se alzan juntos contra guerras, ocupaciones y ataques neoliberales imperialistas, no hay ninguna fuerza que pueda detenerlos.

¡Los pueblos de Palestina e Irak nos muestran el camino - sigámoslos!

¡Solidaridad activa con la resistencia legítima!

 

 

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A pesar de todos los intentos del imperialismo para ocultar su derrota en Irak, la realidad muestra su rostro cada día más claramente: ¡los ocupadores están con el agua hasta el cuello! Ni con las elecciones ni con los debates sobre la constitución el imperialismo consiguió de aparentar democracia o aún de encausar la resistencia legítima contra la ocupación. En Irak, un pueblo entero está ofreciendo resistencia en contra de la ocupación de su país; una ocupación que significa cada día Abu Ghraib, arbitrariedad, violación, provocación de conflictos nacionales, dependencia y miseria.

Se alzaron los pueblos en todo el mundo en contra de esta guerra y la ocupación sigue; millones concurrieron a las calles y gritaban en todos los idiomas: "¡No a la guerra contra Irak!" Vinculado con las protestas en contra de las ataques neoliberales contra los trabajadores de su propio país, expresaron en voz alta su protesta en contra de la agresión contra el pueblo iraquí. Con el fin de reforzar la solidaridad con el pueblo iraquí y su resistencia y de impedir que se saque este tema del orden del día después del anuncio del "fin de la guerra en Irak", una alianza amplia organizó en el mes de mayo de este año en Berlín una conferencia para apoyar la resistencia legítima. El papel tan importante que juega la solidaridad se podía ver una vez más a través de los numerosos intentos llevados a cabo con el fin de impedir esta conferencia. Pero a pesar de todos los intentos de intimidar y de las provocaciones, se llevó a cabo exitosamente la conferencia.

Entre el 1 y el 2 de octubre 2005, será preparada una conferencia internacional en Chianciano para apoyar la resistencia. Cuanto molesta esta conferencia a los que están en el poder se mostró ya por las ataques durante el tiempo de la preparación, entre ellos: redadas, detenciones de organizadores y confiscación de material. Cuando los organizadores no se dejaban intimidar, fueron impuestas otras medidas; 44 senadores norteamericanos ejercieron presión sobre el gobierno italiano, así se rechazaron las visas de entrada a los participantes de la conferencia de Irak bajo el pretexto de que serían "predicadores del odio" y una "amenaza para la seguridad nacional". Los organizadores de la conferencia respondieron con una huelga de hambre. Así es que la conferencia no pudo tener lugar como había sido planeada para el 1 y 2 de octubre, se planificaron actos internacionales de protesta para esta fecha.

En un país donde supuestamente reina democracia se imposibilita a personas de expresar y discutir su opinión libremente. Con este acto el gobierno de Berlusconi y el régimen de Bush nos han dado otra lección en cuanto a cómo debemos entender su democracia: arbitrariedad, ausencia de derechos y opresión.

Pero en el mundo no sólo existen los Bushs, Blairs y Berlusconis, en el mundo hay millones de oprimidos que anhelan un mundo de paz y libertad. Los imperialistas saben bastante bien que tienen sus días contados, porque nada puede detener el rumbo de la historia. Cuándo los pueblos se unen y se alzan juntos contra guerras, ocupaciones y ataques neoliberales imperialistas, no hay ninguna fuerza que pueda detenerlos.

¡Los pueblos de Palestina e Irak nos muestran el camino - sigámoslos!

¡Solidaridad activa con la resistencia legítima!