Es también una tarea internacional de la clase obrera y de los pueblos del mundo que resistir la operación del régimen colonialista turco en Kurdistan del Sur. Nuestro partido PCML llama a todas las fuerzas progresistas y revolucionarios a defender el pueblo Kurdo organizando actividades de solidaridad, acciones de protesta delante de las embajadas turcas y mensajes y faxes de protesta al Estado turco.

01 Enero 2008 / Boletín Internacional / Edición 65

Después de las discusiones Aylardır süren sobre la ocupación del Kurdistán del Norte, el ejército turco ha bombardeado la montaña de Quandil el 15 de diciembre con el apoyo de los EEUU. Los bombardeos aéreos continúan, extendiendose a todas partes del Kürdistan del Sur donde las fuerzas del PKK puedan refugiarse. Según las alegaciones del estado mayor sobre el saldo de la operación, la operación ha causado perdidas graves al PKK. Al contrario, las HPG (Fuerzas Populares de Defensa) hizo una declaración anunciando que las guerrillas no tienen perdidos. Además, salió a la luz la realidad que también los blancos civiles fueron bombardeados en la operación, muchos pueblos kurdos fueron destruidos con las bombas y 1800 personas tuvieron que inmigrarse.
La lucha de liberación nacional liderada por el PKK en Kürdistan del Norte había roto de hecho la política de negación y aniquilación implementada por el Estado turco desde hace 80 años y había anunciado al mundo que la nación kurda y el Kürdistan del Norte se existen. La situación de la burguesía turca se agudizó con el proceso de la formación de un estado en el Sur después de la ocupación de Irak por los EEUU. La situación en el Kürdistan del Sur después de la ocupación yanqui es un proceso legitimado de la formación de un estado kurdo. Este proceso vuelve las pesadillas más espantosas del fascismo colonialista turca en una realidad.
En este contexto, particularmente el frente del ejército fascista quiere aplastar cada corriente de la lucha nacional en Kürdistan del Norte y las fuerzas del PKK hasta la más pequeña parte y además, impedir la formación de un Estado kurdo en Kürdistan del Sur. Mas allá, el CHP (Partido Popular Republicano), parte del frente del ejército, habló sobre el cambio de la frontera turca para que Kürdistan del Sur sea una parte de la República de Turquía.
Pero debido a la realidad que las estrategias de la negación y aniquilación no han tenido éxito desde hace muchos años y que Kürdistan del Sur está bajo la protección de los EEUU, algunos sectores de la burguesía turca empezaron a buscar distintas soluciones al problema. En este marco, se destacó un plan de la solución que es ideal también por la política de los EEUU en Irak y el Medio Oriente. Según este plan, el PKK sea liquidado; en una manera paralela al bloqueo militar que rodea la guerrilla, las organizaciones democráticas kurdas sean presionadas y aisladas políticamente y obligadas a entregarse; así la lucha nacional kurda se entregue a cambio de algunos derechos demasiadamente pocos y insuficientes; y la formación del estado Kurdo en el Sur sea mantenido a salvo de los ataques -por lo menos mientras que los intereses de los EEUU lo requiera.
La reunión de Bush y Tayyip Erdogan, el Primer ministro de Turquía, ha sido un acontecimiento importante donde las discusiones entre las camarillas de la burguesía turca sobre la cuestión kurda y sobre el decreto de la ocupación del Kürdistan del Sur han tomado una forma concreta. En esta reunión, avanzaron en el plan de la solución estadounidense. La Administración del Kürdistan del Sur fue convencido de que la operación no apuntaré ellos y tomando una postura menos dura ante las amenazas del Estado turco, mantuvo su silencio ante las operaciones militares contra el PKK en su territorio.
La operación en Quandil se realizó en el marco de este plan, con el apoyo de la inteligencia de los EEUU, bajo el silencio de la administración kurda en el Sur y al lado de la agresión muy intensa contra el pueblo y las posiciones kurdas en Turquía y Kürdistan del Norte. En el mismo periodo, también continuaron las operaciones militares en el Kürdistan del Norte. Se intensifica la presión sobre el DTP y el bloqueo político para asilarlo, sobretodo la sobre los diputados y dirigentes del partido. Nurettin Demirtas, copresidente del DTP ha sido encarcelado. Así, los EEUU y el estado turco intentan incluir el DTP, la cual consideran como el sector del movimiento más débil a la influencia externa, en sus planes de obligar el movimiento a entregarse. Por otro lado, una nueva ley de arrepentimiento con el nombre "La Ley de Volver a Casa" ha sido adoptada para reforzar los esfuerzod de obligarlo entregarse.
La operación satisfizó la psicología en de la cual las masas obreras y trabajadoras turcas son arrastradas a través de la propaganda chauvinista. La oligarquía del capital y el gobierno del AKP están contentos. La camarilla de los generales trata de recompensar la perdida de crédito causada de su derrota en las elecciones generales. Por otro lado, mantiene su objetivo verdadero de impedir la formación de un Estado kurdo en el Sur. Este objetivo de ella seactualizará de nuevo en los conflictos entre las camarillas burguesas y en las relaciones con los EEUU y los generales seguirán resistiendo al plan estadounidense. Por eso, las contradicciones entre estas fuerzas todavía no están terminadas. Además, la eficacia del plan de la solución yanqui dependerá en la postura de las fuerzas del movimiento nacional kurda y de los obreros y trabajadores turcos.
Es también una tarea internacional de la clase obrera y de los pueblos del mundo que resistir la operación del régimen colonialista turco en Kürdistan del Sur. Nuestro partido PCML llama a todas las fuerzas progresistas y revolucionarios a defender el pueblo Kurdo organizando actividades de solidaridad, acciones de protesta delante de las embajadas turcas y mensajes y faxes de protesta al Estado turco.