La dictadura fascista colonialista anunció de nuevo que no adoptará una solución democrática en la cuestión kurda. La respuesta dada a todos los esfuerzos del movimiento nacional kurdo por la paz es la agudización de la política tradicional de negación y aniquilación.
La nueva medida de la dictadura fue contra las conquistas democráticas del pueblo kurdo y contra sus actividades políticas legitimas y legales. A pesar de todos los obstáculos y de la represión, el DTP (Partido por la Sociedad Democrática) tuvo éxito en las últimas elecciones, enviando diputados al parlamento y formando su propia fracción dentro del parlamento. Esto es inaceptable para el estado turco que tampoco acepta el derecho del pueblo kurdo a la actividad política legal. Es sólo una cuestión de tiempo que de encontrar cualquier oportunidad para liquidar los representantes del pueblo kurdo de la vida política. Después de los interrogatorios contra algunos diputados a pesar de la impunidad parlamentaria, el fiscal general ya ha abierto un proceso para prohibir el DTP. La demanda de este proceso es el cierre del DTP como partido y de prohibir a 7 diputados y 221 dirigentes y miembros del DTP la actividad política por los 5 años a venir. La demanda de cierre es una parte del concepto que se basa en la política de negación y de aniquilación. El tribunal Constitucional ha aceptado esta demanda y el proceso ya ha comenzado.
El procedimiento para prohibir el DTP se basa en el argumento que este partido "se ha convertido en el centro de las acciones contra la soberanía del estado y de la unidad indivisible de el, del país y de la nación". En la acusación se alega que el DTP es el sucesor del partido DEHAP (El Partido Democrático Popular) que también ha sido cerrado, que el DTP fue fundado en la línea de las directivas del líder de PKK Abdullah Ocalan y que trabaja según los objetivos del PKK. Diversas declaraciones de los diputados afiliados al DTP, sus discursos están en el canal de televisión kurdo Roj TV así como muchas acciones y actividades organizadas por el DTP se consideran como crímenes y también se alega que los activistas del DTP, encarcelados como resultado de las batidas policíacas en las oficinas del DTP, habían ayudado y apoyado el PKK. En la acusación tiene lugar también los esfuerzos de los diputados afiliados al DTP para que el PKK ponga en la libertad a los 8 soldados turcos a las cuales había tomado como rehenes en el mes de octubre.
Otro punto que llama la atención en los procesos legales para prohibir los partidos políticos es el hecho de que los procesos se manejan como sí fuesen "procesos criminales" aunque sea el Tribunal Constitucional que los instruye.
Este nuevo ataque contra el pueblo kurdo fue enfrentado a través de protestas en todo el país. El presidente del DTP expresó que el Tribunal impide que "Turquía se convierta en un país democrático y moderno" y convierte el país "en un cementerio de partidos".
Muchas fuerzas, entre ellos la Plataforma Socialista de los Oprimidos ( E SP ), los sindicatos y los intelectuales, organizaron acciones de solidaridad y declararon abiertamente que este procedimiento es un ataque contra las conquistas democráticas del pueblo kurdo y constituye un escándalo inaceptable.
El estado turco ha cerrado muchos partidos políticos durante su historia. Una parte importante de ellos fueron los procedimientos de cierre contra las organizaciones políticas del pueblo kurdo. Sin embargo, la prohibición de los partidos no tuvo ningún éxito y el pueblo kurdo siempre reconstruyó sus organizaciones políticas basándose en la lucha armada organizada. El pueblo kurdo no consiguió este derecho del Estado turco sino que gracias a su propia lucha legítima. El procedimiento abierto para prohibir el DTP es claramente un indicador del dilema de la dictadura fascista colonialista en la cuestion kurda.