Esta batalla gloriosa del pueblo kurdo en las montañas del Kurdistán del Sur es también una gran oportunidad para llevar esto también a las calles, plazas, barrios obreros y fábricas de Turquía y Kurdistán del Norte.

01 Marzo 2008 / Boletín Internacional / Edición 67  

Con su política de negación y aniquilación, el régimen fascista turco lleva a cabo una guerra sucia contra el pueblo kurdo desde varias décadas. En el curso de esta guerra, realizó operaciones militares no solo en el Kurdistán del Norte (la parte de Kurdistán dentro de las fronteras de la República Turca) sino también en Kurdistán del Sur (la parte de Kurdistán dentro de las fronteras de Irak). Uno de los objetivos de estas operaciones es debilitar la lucha de liberación nacional kurda y sus fuerzas armadas las HPG (Fuerzas Populares de Defensa). En los últimos años el estado burgués turco se preocupa también ante el actual progreso hacia la formación de un estado kurdo en Kurdistán del Sur. Quiere impedir esta formación a toda costa y realizar los sueños del fascismo de expansionarse hacia Mosul y Kirkuk que son ricos en petróleo.
El 16 de diciembre de 2007 la dictadura fascista colonialista turca inició un nuevo ataque aéreo contra el Kurdistán del Sur. Después de no tener mucho éxito, tal como en sus operaciones anteriores, la dictadura fascista logró obtener el permiso del imperialismo yanqui para una operación de tierra por un corto tiempo. Aunque el imperialismo yanqui está de acuerdo en principio con la dictadura fascista en reprimir por todos los medios las luchas militantes de liberación nacional, como la del pueblo kurdo en Kurdistán del Norte, aún hay diferencias en los intereses entre la gran potencia imperialista y su sirviente debido a la situación política actual y a la correlación de los poderes en el Medio Oriente. Los EEUU están empantanados allí y no quieren perder el apoyo de sus colaboradores bajo la dirección de Barzani y Talabani. Por eso, no quiere que la tensión de las relaciones aumente entre su "socio estratégico" (Turquía) y sus partidarios entusiastas en Kurdistán del Sur que planean lograr la fundación de un estado separado a través de la colaboración con el imperialismo. Sin embargo, después que que Barzani y Talabani han asegurado que no defenderían sus hermanos kurdos y no harían nada en contra de la ocupación de la Región Autónoma de Kurdistán, los EEUU dieron luz verde a la Turquía para las operaciones terrestres. Indudablemente, los EEUU han asegurado ventajas futuras en sus negociaciones con el estado turco, como el apoyo más activo de la dictadura colonialista turca a la política yanqui de ocupación en el marco del Proyecto del Gran Medio Oriente.
Acompañada por una gran oleada de propaganda chauvinista, la operación de tierra se inició el 21 de febrero; 10.000 soldados turcos pasaron la frontera de Kurdistán del Sur.
El ejército turco había perdido su prestigio y su iniciativa política después de las elecciones del 22 de julio y de las elecciones presidenciales. Uno de los motivos por los cuales los generales tenían tantas ganas de realizar la operación fronteriza fue el objetivo de reforzar su propia posición política y su base de masas. Sin embargo, fracasaron es este plan también!
Al atacar las guerrillas kurdas de liberación nacional que luchaban heroicamente y que están organizadas muy bien bajo condiciones muy duras, el ejército turco recibió golpes pesados desde los primeros días de la operación. Volvieron los cuerpos muertos de los soldados turcos, un helicóptero del ejército turco fue acribillado por la guerrilla y se cayó y la Comandancia Central de las HPG llamó a la juventud kurda de las grandes ciudades de Turquía a la rebelión. Estas fueron las respuestas a la ocupación colonialista. El pueblo kurdo y la guerrilla no se retrocedieron sino que defendieron sus puestos determinadamente ante los ataques brutales.
Después de 8 días, todo dio un giro que fue sorprendente para muchos: el 29 de febrero por la mañana, el ejército turco se retiro completamente del Kurdistán del Sur. Incluso el Primer Ministro Tayyip Erdogan parecía sorprendido de esta retirada. Mientras que todo el mundo hablaba de este acontecimiento en los medios de comunicación, las autoridades de Turquía quedaron silenciosas. La primera noticia oficial sobre el retiro del ejército turco fue dada por el Ministro de Asuntos Exteriores iraquí Hosyar Zebari. Él dijo en la Reuters que "los soldados turcos han comenzado a retirarse del Norte de Irak a las 4 de la mañana".
El primer ministro había dicho por la mañana que "la operación continuaba decididamente". Los generales siempre aseguraban que la operación continuaría hasta alcanzar sus objetivos.
En la declaración del Estado Mayor del 29 de febrero por la tarde, se confirmó que todas las tropas del ejército se habían retirado del Norte de Irak". Se alegó que los objetivos previstos de la operación fueron logrados, que eso fue la única razón de la retirada y que ninguna fuerza extranjera tuvo influencia en esta decisión. Sin embargo, el ejército turco admitió lo siguiente al mismo tiempo: "No hay duda que una organización terrorista no puede ser totalmente aniquilada con una operación llevada a cabo en una región." El gobierno y los generales se hicieron más y más atrapados entre las contradicciones al intentar ocultar la causa verdadera de la retirada repentina.
Claro que el ejército turco no logró ningún éxito importante en su lucha contra las HPG. Esto es admitido abiertamente incluso por las personas de sus propias filas. El general jubilado Hasan Kundakci dice que el ejército hubiese tenido algunos éxitos, pero los más importantes blancos, tales como los puestos en la región de Zap, sólo podrían ser golpeados en los días siguientes.
Parece que la razón de esta retirada repentina del ejército fascista colonialista del Kurdistán del Sur es el hecho que el imperialismo yanqui dijo la última palabra.
El 28 de febrero, el Ministro de Asuntos Exteriores de los EEUU Robert Gates habló con el Presidente, el Primer Ministro, el Estado Mayor y el Ministro de Defensa en Ankara y planteó la demanda de Bush que el ejército "debe retirarse lo más rápidamente posible." Lo más rápido la operación se había iniciado después de la decisión del Consejo de la Seguridad Nacional turca, incluso más rápida fue la retirada después del mando de los EEUU. El régimen turco sufrió una gran debacle ante los ojos del mundo entero, y en particular, de los obreros y trabajadores de Turquía y Kurdistán del Norte.
A las pocas horas, después que los grandes maestros han pedido que se retiren las tropas, los soldados se sentaron en sus casas cuarteles. No será fácil en el futuro de hacer grandes discursos sobre la heroica batalla del ejército turco, de su independencia de las fuerzas extranjeras y de su victoria en las operaciones terrestres. El régimen fascista no ha podido golpear el movimiento nacional kurdo seriamente ni ha podido mejorar su imagen que se ha deteriorado. ¡Fracasó en todos los frentes!
Según la declaración del estado mayor, 24 soldados turcos y 3 guardias locales, así como 240 guerrilleros del PKK murieron en las operaciones terrestres. El HPG informó que más de 125 soldados murieron durante los ataques de la guerrilla y 9 guerrilleros fallecieron, como mártires. Las HPG evaluaron la operación del ejército turco como la "más miserable, vergonzosa e infructuosa" de la historia del ejército turco.
Con esta heroica resistencia, nuestro pueblo kurdo ha mostrado una vez más que no va a someterse ante la opresión brutal de la dictadura fascista y colonialista, y que está preparado para continuar la lucha por sus demandas legítimas por todos los medios. Esta batalla gloriosa del pueblo kurdo en las montañas del Kurdistán del Sur es también una gran oportunidad para llevar esto también a las calles, plazas, barrios obreros y fábricas de Turquía y Kurdistán del Norte.