En el último tiempo se trata de poner la juventud en Turquía y Kurdistán del Norte en un aprieto con ataques fascistas.  

1 de Mayo / Boletín Internacional / N° 69 

En el último tiempo se trata de poner la juventud en Turquía y Kurdistán del Norte en un aprieto con ataques fascistas. Estos ataques contra la juventud, que es el grupo más activo de la sociedad, son planeados y organizados y llevados a cabo en colaboración con la policía, unidades especiales de seguridad y fascistas civiles.
El ataque armado llevado a cabo por un grupo de fascistas el 6 de abril en el campus de la Universidad Mediterránea contra estudiantes revolucionarios y democráticos delante de las cámaras de la prensa, en el cual 7 estudiantes fueron heridos, está mostrando la dimensión de los ataques fascistas en los últimos tres meses, que han aumentando en diferentes universidades contra los estudiantes. El 27 de abril un estudiante de la Universidad Inonu y al mismo tiempo presidente de la Asociación Socialista Juvenil ( SGD ) en Malatya, Sinan Tanriverdi, fue atacado en plena calle. Esto muestra una vez más, que tales ataques a jóvenes son planeados y persiguen un cierto fin.
Tales ataques no son algo nuevo para los revolucionarios y comunistas en Turquía y Kurdistán del Norte. Siempre cuando hubo un desarrollo en la organización y la lucha de la juventud la dictadura fascista llevó a cabo planes semejantes. Con el fin de especialmente impedir la lucha de la juventud estudiantil, primero hicieron los fascistas civiles como también la policía y las unidades especiales de seguridad atacar estudiantes revolucionarios y democráticos. La policía observó los ataques fascistas sin hacer nada y a continuación detuvo los estudiantes atacados en vez de detener los agresores que habían atacado. Mientras que bajo el pretexto de "seguridad" se guarda todos los datos de los estudiantes, el fin también es anunciar el estado de sitio en las universidades según las directivas de YOK (Consejo Alto de Educación).
El fin de los ataques consiste en intimidar la juventud. El hecho de que los estudiantes han mostrado más interés en los problemas de la clase obrera y sus luchas, han llevado a cabo acciones de solidaridad como la marcha del campus a los astilleros y han defendido la fraternidad de los pueblos contra el racismo y el fascismo y organizaron por eso una marcha hacia Kurdistán y que han aumentado la lucha contra las operaciones militares en Kurdistán, dio miedo a la dictadura fascista. La juventud está viendo su liberación más y más en la liberación de la clase obrera y participa en la lucha de la clase obrera. Los ataques persiguen el fin de calmar la juventud y distraerla de la lucha de clases.
La juventud estudiantil, enfrentándose determinadamente al ataque unido de las fuerzas de la policía, las fuerzas de los fascistas civiles y los servicios privados de seguridad de las universidades y de la administración de las universidades, está determinada a romper el cerco. Los ataques fascistas no quedarán sin respuesta. Los jóvenes luchando contra estos ataques dicen: "Es tiempo de luchar" y muestran su determinación de luchar contra los ataques fascistas. En el espíritu y con la determinación de 1968 la perspectiva y acción de la juventud de defender la lucha de la clase obrera es el camino justo que hay que desarrollar y que está desarrollándose.