Zonguldak lleva las dinámicas, la acumulación y la ira para una nueva resistencia obrera. El chauvinismo, las ilusiones creadas por los centros reaccionarios, las consecuencias de la crisis y las malas condiciones de vida y de trabajo obliga a los obreros a hacerlo. Son los comunistas los que deben llevar la conciencia y la organización a los obreros. Y es claro que la emancipación de la barbaridad y la explotación capitalista es solamente posible con el aumento del nivel de la conciencia y organización y de la acción revolucionaria.

01 Junio 2010 /Boletín Internacional / N° 94

Se produjo otra vez una explosión de grisú el 17 de mayo de 2010 en las minas de Zonguldak que es un centro de los asesinatos laborales en masas (el movimiento obrera denomina los "accidentes" laborales como "asesinatos" laborales). Esta vez 30 obreros perdieron sus vidas bajo las ruinas. Los dolores y las lágrimas de los familiares, de las esposas y de los hijos e hijas que se quedaron por si solas se reflejaron en las televisiones.
En el mes de diciembre de 2009, 19 obreros murieron en una mina del sector privad en Bursa. En el mes de febrero de 2010, 13 obreros perdieron sus vidas en una mina del sector privada en Balikesir. Poco después de este acontecimiento doloroso, 30 obreros fueron atrapados bajo las ruinas 540 metros bajo tierra en Zonguldak, causando otro sufrimiento a todo el país, sobretodo a los obreros, trabajadores y pobres.
Zonguldak es una ciudad obrera que se conoce con las muertes en masas en las explosiones de grisú y bajo ruinas. En la mina de Armutcuk, 103 obreros se murieron en 1983. En 1992, 263 obreros se murieron en la mina de Kozlu. Decenas de obreros perdieron sus vidas en numerosos otros accidentes laborales de varias dimensiones. En este centro obrero, las malas condiciones de trabajo, la informalidad, la falta de la implementación de las normas, la falta del control, la falta de la sindicalización y la falta de la seguridad en el trabajo siguen dejando a los obreros y trabajadores que tienen que vender su mano de obra bajo el riesgo de muerte y herida.
El bajo nivel de la sindicalización en Turquía, así como la limitación de la libertad a sindicalizarse, la falta del control, la falta de las medidas de seguridad en el trabajo y de los trabajadores, el trabajo flexible y los ataques de privatización y tercerización han empeorado las condiciones de trabajo. Y esta situación ha impedido tomar medidas técnicos, de educación etc. contra los accidentes laborales.
Zonguldak tiene un lugar especial en la historia de la lucha de clases del proletariado de Turquía y Kurdistán del Norte con la resistencia de los mineros del noviembre de 1990. La huelga y la resistencia de los mineros se volvieron en la resistencia de toda la población de Zonguldak. Y mostró que existen grandes dinámicas, condiciones y oportunidades de crear y aumentar un movimiento obrero revolucionario en Turquía. Los mineros marcharon hacia el Capital Ankara con la consigna "Hemos quemado todas las barcas. No hay ningún camino atrás" y el gobierno de ese periodo tuvo que renunciarse ante esta resistencia.
Turquía es el primero en Europa en relación al alto nivel de los accidentes laborales con muertes. La razón de esto es las condiciones de trabajo informal, sin normas, sin control e inhumanas. Se produjeron y siguen produciéndose decenas de accidentes laborales en los astilleros, en textil, construcción, municipalidades, cuerpo de bomberos etc.
El último de estos accidentes se produjo el 27 de mayo en el astillero Selahattin Arslan en la zona de astilleros en Tuzla en donde los accidentes laborales son muy frecuentes. El accidente se resultó en la muerte de un obrero.
Las fuerzas y las organizaciones de nuestro PCML llaman a los obreros y trabajadores -los que tienen que trabajar en las minas, en los astilleros de Tuzla, en el sector de textil, en las construcciones, en el sector de la química y en otros sectores bajo las condiciones de informalidad, sin normas, sin control y inhumanas- a luchar activamente en las calles contra la barbaridad del capital y la ignorancia del gobierno del AKP .
Sabemos que lo que permite a la burguesía monopolista colaboradora y al Estado colonialista actuar tan desenfrenada, desinteresada e insensible ante los accidentes laborales es la falta de la organización política de la clase obrera en masas, o sea, el bajo nivel de su organización en todos aspectos y la debilidad de su acción. Este proceso pone importantes tareas históricas y actuales delante de las vanguardias de la clase obrera.
Zonguldak lleva las dinámicas, la acumulación y la ira para una nueva resistencia obrera. El chauvinismo, las ilusiones creadas por los centros reaccionarios, las consecuencias de la crisis y las malas condiciones de vida y de trabajo obliga a los obreros a hacerlo. Son los comunistas los que deben llevar la conciencia y la organización a los obreros. Y es claro que la emancipación de la barbaridad y la explotación capitalista es solamente posible con el aumento del nivel de la conciencia y organización y de la acción revolucionaria.

El 26 de mayo: Los obreros salieron a las calles a pesar de la traición de los sindicatos

Las acciones del 26 de mayo, que fue decidido hace tres meses como el día de acción general por las tres confederaciones sindicales la KESK , la DISK , la Kamu-Sen y la Turk-Is han sido muy débil debido a la actitud de las confederaciones que mostraron su línea traidora no llevando a cabo su propia decisión. La única confederación que implementó la decisión era la KESK. Las acciones realizadas en muchas ciudades a pesar de la actitud de los sindicatos amarrillos formaron el aspecto fuerte del 26 de mayo. Otro elemento importante del proceso era las acciones de los obreros de TEKEL, de Esenyurt y de los bomberos en la resistencia que tomaron los edificios de la Turk-Is pocos días antes del 26 de mayo obligando la confederación a salir a las calles.
El pretexto de la decisión de organizar la acción general del 26 de mayo tenía 12 puntos incluyendo las reivindicaciones más esenciales de la clase obrera y de los trabajadores, en el primer lugar las reivindicaciones contra el trabajo flexible y la tercerización. Ninguna de estas reivindicaciones fue aceptada por el gobierno en el proceso pasado y además, se produjo el desastre en una mina en Zonguldak solo una semana antes del 26 de mayo. Esto hizo que la acción general del 26 de mayo se vuelva más urgente e importante, que podría acelerar la lucha contra las políticas anti-obreras y por eso, debía ser realizado con las reivindicaciones en contra de los "accidentes" laborales como uno de los puntos centrales. Pero los sindicatos amarillos no lo hicieron.
Las acciones del 26 de mayo denunció más abiertamente la línea traidora que fue denunciado en el ejemplo de la Turk-Is durante la resistencia de TEKEL.